El Social Networking necesita una mezcla de dos recursos para obtener resultados: hablar y escuchar. No basta con unirse a grupos afines y no parar de compartir contenidos (ya sean propios o ajenos). Hay que saber buscar el equilibrio, e intentar generar el máximo engagement posible con los seguidores tanto publicando contenido de interés como escuchando sus dudas y respondiendo siempre a todo lo que comentan. Esto garantizará un mayor éxito con el Social Networking.

La meta del Social Networking es crear una red de seguidores y empezar a sembrar relaciones, única y exclusivamente. Posteriormente, puede que esto se traduzca en clientes potenciales. De todas formas, ese no es el objetivo del Social Networking, si no el objetivo del Social Media, donde se trabaja en la generación de leads para intentar que se conviertan en ventas.

¿Cómo podemos medir el Social Networking? Para saber cual es el retorno sobre la inversión (de tiempo y esfuerzo en este caso), se tomarán como base las respuestas obtenidas. Si los seguidores han aumentado notablemente, ya podemos deducir un resultado positivo.